El proyecto en proceso vencedor de la convocatoria de Creadores del Ayuntamiento de Madrid es una propuesta de investigación, desarrollo e implantación en espacios privados y públicos de un elemento común: la bandera de España. Mediante una campaña de publicidad y de marketing calle por calle, casa por casa, se plantea una acción artística que finaliza con una obra ya preparada para una futura exposición.
La Bandera de España, como símbolo que es de nuestra Patria y como representación de los valores supremos de la Constitución debería ser cuidada. El actual estado de estas banderas, tanto en el ámbito privado como son los balcones y jardines de propiedades, como en el ámbito público, en mástiles de ayuntamientos y otros edificios públicos, es lamentable. Descoloridas, corroídas, rotas, estropeadas, dando una imagen de España que es bastante peyorativa.
El proyecto es una continuación del trabajo que llevo desarrollando desde 2017 con el concepto de - el estado de la nación- en el que planteo instalaciones, casi ready mades, hablando de leyes, organismos, símbolos creados y mantenidos para salvaguardar el concepto de España.
Hasta la fecha ha habido varias piezas claves del proyecto:
Los coches adquiridos en desguaces de cuerpos del Estado de la Guardia Civil, la Policía y el Ejército, que han sido customizados para plantear distintas problemáticas. Se han mostrado en festivales, galerías, plazas públicas y espacios independientes bajo los nombres de Caídos, Apuntalados, Hundidos, Divididos y Donde no se pone el sol.
Por otra parte en Bipartidismo creé una instalación site specific para una galería de Madrid con dos vidrios de grandes dimensiones intervenidos.
Con Discurso planteaba la imposibilidad del diálogo en/con los órganos de poder y con/para la ciudadanía. Esta pieza también se ha mostrado en varios espacios independientes.
En Sentencias planteaba a modo de acción, instalación y vídeo el revuelo causado por la investigación del Caso Gürtel. Éste se ha desarrollado en varias localizaciones, desde la playa de Málaga, pasando por el Cementerio del Arte de Morille y finalizando en festivales y espacios independientes del territorio nacional.
Por último el proyecto más reciente de esta serie, apoyado con una beca de la Comunidad de Madrid y desarrollado en varios países y espacios, es Cortina de Humo, donde hablo de revolución, humo e invisibilidad como tácticas de evasión, ya sea de dinero o de personas.
En todos ellos cuestiono el concepto de España como ya caduco, basado en unas leyes y un sistema nacido en otra época ya obsoleta. Donde la fragmentación, la ruptura es apuntalada para no desvencijarse.
Así mismo en el proyecto que propongo para esta beca, quiero dar visibilidad a nuestra realidad política, a esa estructura que precisa ser revisada, que se desmorona, utilizando para ello el símbolo de la bandera. Este planteamiento pone en evidencia los varios intentos fallidos de reforzar la unidad de España, el Símbolo y hasta el Himno (como hizo recientemente Marta Sánchez) realizados en el pasado.
No es una crítica a un cuerpo en especial, sino a un concepto de Estado - Nación que por su propia naturaleza no es más que la cáscara caduca.